¡Las tarifas ocultas! Ese toque sorpresa que hace que te preguntes si compraste un camión o agujero negro. Si eres dueño de camiones, sabes bien de qué hablamos. Pero no te preocupes, aquí te dejamos cinco consejos para lidiar con estas pequeñas trampas que intentan colarse en tus costos.
1. Lee todo. Dos veces
Sabemos que leer el contrato es aburrido. Pero cuando no lo haces, de repente aparece esa tarifa misteriosa por «mantenimiento administrativo» que nadie te mencionó. Asegúrate de entender cada cláusula antes de firmar.
2. Evita los paquetes «todo incluido»
¿Parece estupendo pagar una tarifa mensual fija? Spoiler: podría ser una mala decisión. Los contratos de leasing con tarifas todo incluido suelen inflar costos como si estuvieras pidiendo un servicio de lujo. Desglosa los costos y mantén el control.
3. Pregunta por los costos no incluidos
Porque cuando te dicen «tranquilo, lo cubre todo», casi siempre hay un «pero». Y ese «pero» suele ser una tarifa por milla, un sobrecargo por neumáticos o algún otro invento. Pregunta, y no temas ser insistente.
4. Haz un presupuesto flexible
La economía es tan volátil como el precio del combustible. Un presupuesto rígido es una receta para el desastre cuando esas tarifas inesperadas aparecen. Mantén algo de margen para imprevistos.
5. No tengas miedo de negociar
Sí, es posible. Las tarifas ocultas no son la ley, y con algo de insistencia, puedes conseguir mejores condiciones. Cuestiona todo lo que no parezca claro y usa el sarcasmo (con moderación) para hacerle saber a tu proveedor que no te vas a dejar engañar.
Al final del día, el objetivo es que manejes tu negocio, no que las tarifas te manejen a ti.