Un reciente accidente en las afueras de Seattle reavivó el debate sobre la seguridad de los vehículos autónomos. El vehículo involucrado fue un Tesla Model S 2022 que operaba con el sistema “Full Self Driving”.
Según los informes, el conductor del Tesla estaba distraído con su celular cuando el vehículo aceleró inesperadamente y colisionó contra una motocicleta. El accidente terminó en la muerte de Jeffrey Nissen, de 28 años.
De acuerdo con el CEO de Tesla, Elon Musk, el sistema “Full Self Driving” debía estar completamente autónomo para finales de este año. Sin embargo, ha declarado que fue demasiado optimista. Y es que a pesar de sus promesas, la tecnología todavía enfrenta desafíos importantes en cuanto a seguridad.
Lo cierto es que este accidente reabrió el debate sobre la seguridad de los vehículos autónomos y la falta de regulación federal en el sector. Las agencias reguladoras, como la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras, aún no han establecido un marco claro para la operación segura de estos vehículos.
Mientras tanto, defensores de la seguridad y sindicatos de trabajadores, como el Teamsters, exigen una supervisión más estricta. Temen que la falta de regulación y testeo adecuado de los vehículos puedan poner en riesgo a todos en la carretera.
