Miles de camioneros en Estados Unidos (EE.UU.) podrían verse forzados a dejar de conducir debido a una nueva medida de la Administración Federal de Seguridad de Autotransportes (FMCSA). Y es que la agencia suspenderá las licencias comerciales (CDL, por sus siglas en inglés) de quienes tengan un estado «prohibido» en la base de datos de infracciones de drogas y alcohol. Hasta donde se conoce, 163 318 conductores con CDL y permisos de aprendizaje comercial (CLP) se encuentran en esa condición.
Cómo no perder mi licencia
La base de datos de la FMCSA, conocida como Drug & Alcohol Clearinghouse, rastrea las violaciones relacionadas con pruebas de drogas y alcohol. Si un conductor es marcado como «prohibido», no puede operar vehículos comerciales hasta completar el proceso de Regreso al Servicio (RTD, por sus siglas en inglés).
El 18 de noviembre próximo, las Agencias Estatales de Licencias de Conducir (SDLAs) comenzarán a degradar las licencias de los conductores que no hayan iniciado el proceso RTD. Este movimiento sigue a la implementación de la regla original del Clearinghouse en enero de 2020. La misma obliga a las empresas de transporte a verificar la base de datos antes de contratar conductores. Además, las obliga a revisar anualmente los datos de sus conductores actuales.
Para que un chofer recupere su CDL debe completar el proceso RTD, que incluye una evaluación y pruebas de seguimiento. La nueva regla de Clearinghouse-II refuerza las medidas para asegurar que los conductores con un estado «prohibido» no posean licencias comerciales.
Las reacciones en redes sociales han sido mixtas. Algunos conductores están preocupados por la pérdida de empleo, mientras que otros ven la medida como una oportunidad para mejorar la seguridad en la industria.